Autor: Euclides José Puello Sarmiento
ORIGEN DE TIENS
TIENS tiene su origen en el GRUPO TIENS, que fue fundado por un soñador llamado Li Jinyuan, quien después de muchas dificultades, por su persistencia en la consecución de su sueño, por fin consiguió lo que más deseaba: Dejarle a la humanidad una nueva fórmula para mejorar la calidad de vida de todas aquellas personas que se atrevieran en creer en su propuesta.
Y además, una nueva fórmula para buscar el camino hacia la consecución de ingresos y así también llegar a conseguir un mejor nivel financiero. Pero su sueño en primer lugar debemos pensar que se lo debe y debemos a Dios el creador de la naturaleza y de todo cuanto existe, y en segundo lugar por supuesto a esta Gran SoñadorLi Jinyuan.
Li Jinyuan, de nacionalidad China, fundamentado en sus experiencias en la Medicina Milenaria Tradicional China que data desde más de Cinco Mil (5.000) años, se dio a la tarea de proponerle a la humanidad, un portafolio de productos únicos en su modalidad, ofrecerle una fórmula diferente a la tradicional, diferente a la convencional, a la alopática y fue así como crea el GRUPO TIENS en el año 1.995.
Y en cuanto a la Prosperidad nos propone un Plan de Compensación novedoso. Entonces su objetivo está encaminado hacia dos visiones:
- Salud
- Prosperidad
Fue así como propuso lo que él llama las dos ventanas, la ventana de la Salud y la ventana de la Prosperidad.
Los productos que nos ofrece, tienen efectos muy pero muy diferentes a los Fármaco-Químicos, entre otras razones porque apuntan a la prevención de las enfermedades antes que aparezcan.
Hoy se puede asegurar que consiguió su sueño porque los resultados experimentados, han permitido que el Grupo Tiens hoy haya sido aceptado con todas aquellas compañías que se han venido formando con base en el grupo, en más de 190 países y regiones, hoy ya es conocida en todos los continentes y para poner un ejemplo en Rusia, fue aceptada por señor Mijaíl Serguéyevich Gorbachovúltimo dirigente de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, quien tuvo muy en cuenta los resultados obtenidos con el consumo de uno de los productos banderas propuesto por el Grupo Tiens, el Calcio.
VISITA A COLOMBIA
A Li Jinyuan le gusta tomarse su tiempo. Hablar con pausas, argumentar muy bien cada palabra e indicar cada uno de sus planes. Por eso prefiere siempre responder en chino, el idioma que conoce, en el que puede explayarse, el mismo con el que logró una fortuna avaluada por la revista Forbes en US$1.200 millones.
También le gusta escuchar todo tipo de opiniones antes de tomar una decisión y conocer de antemano los escenarios en los que invertirá. Por eso tomó un avión e inició una gira por Perú, Venezuela y Colombia, tres países que serán estratégicos para el futuro de Tiens Biotech Group, uno de los principales conglomerados del gigante asiático.
“No necesitamos más informes de factibilidad porque ya sabemos que vamos a invertir en Colombia. Hemos decidido abrir una oficina central en el país y actualmente evaluamos los lugares para instalar nuestra primera planta de producción de suplementos nutricionales, cosméticos, productos para el cuidado de la piel e, incluso, detergentes”, comenta sobre ésta, su segunda visita en dos años a Bogotá.
Fue a finales de noviembre de 2011 que selló por primera vez su pasaporte en el aeropuerto Eldorado. Entonces buscaba la mejor forma de aprovechar el buen momento de las economías de la región y sostuvo reuniones con industriales, el alto gobierno y con el expresidente Álvaro Uribe.
Él fue el primero en recibirlo en este nuevo viaje, y hablaron sobre los beneficios de la política de zonas francas. De hecho, su empresa evalúa el mejor lugar para instalar su planta, la séptima en el mundo, bajo esta reglamentación.
“Confiamos en el país, es el lugar más óptimo de América Latina para expandirnos. Por su solidez política e institucional, pero también por los acuerdos comerciales que ha firmado con Mercosur, Estados Unidos y Europa. Y por los trámites que está iniciando con China para hacer lo propio”, resume su traductor.
Pero ésta será apenas la primera parte de su plan para el país, pues una vez instalados aprovecharán la ubicación geográfica para apostarle a la exportación de alimentos, madera y minerales como oro, cobre, plata, hierro, carbón y zinc.
Para este proyecto en especial, la multinacional piensa destinar US$2.000 millones y estudia la mejor forma de ejecutarlo: si se asocia con alguna compañía ya instalada en el país o inicia tareas de exploración por sí misma.
Planes de gran envergadura, muy ambiciosos, que explica a su debido momento, haciendo pausas. Quizás adoptó esa forma de ser en 1994, al hallarse en medio de las aguas del lago Swan, en la ciudad de Tianjin, el lugar que había elegido una noche para acabar con su vida.
Contaba entonces con 36 años y ninguna suma de dinero en su cuenta bancaria. Porque después de haber amasado una auténtica fortuna de 240 millones de yuanes en los años 80, como comerciante de bienes por toda China, la perdió en el afán de multiplicarla.
El causante de aquella jugada fue un proyecto tecnológico para producir calcio, al que le invirtió toda su juventud, fondos y experiencia, pero con el cual fracasó a la vuelta de un año.
Cuando se encontraba en medio del agua, Li Jinyuan entendió que podía sobreponerse a la mala fortuna. Se asesoró con uno de los más prestigiosos nutricionistas de China y logró reunir 4,5 millones de yuanes en 1995 para echar a rodar una nueva idea: la fabricación de suplementos nutritivos en polvo a partir del calcio.
Tiens, aquel proyecto, se ha expandido hoy a 110 países, cuenta con 17 laboratorios de investigación, 50.000 franquicias y 16 millones de familias que distribuyen sus productos a través de la modalidad de multinivel.
Sus convenciones anuales no sólo son reconocidas por el gigantesco número de participantes sino por los regalos con que la multinacional premia a sus empresarios: limusinas, aviones, yates y mansiones.
“He tenido la suerte de crear y poseer una gran fortuna. Pero ya no me pertenece, porque viene de la sociedad y a ella debe volver”, asegura, sin perder la calma que lo caracteriza.
Entrevista tomada de El Espectador