Autor: Evaristo Camargo-Rodas
En términos cinematográficos, el otrora Teatro Rex de Barranquilla ha sido remasterizado como si una joya del celuloide, de valor incalculable, se salvara de los estragos del tiempo. En términos arquitectónicos ha tenido la intervención en que es es notable por los expléndidos resultados que gratifican la vista, (el cine, ¿acaso no es más que todo una experiencia visual?) no solo con esmero sino extremo cuidado al combinar con depurada maestría la restauración y conservación de su estilo Art Deco, sino en —respetando ese estatus— conectarlo -arquitectónicamente- en diseños a todas luces entronizados en la contemporaneidad.
En términos históricos, esta categórica preservación de un gran bien material, introduce vida a la memoria de la ciudad tan dada, por quienes se creen sus dueños venidos de lodos forasteros dudosos, a destruir y demoler sin miramientos -corronchos con plata- este tipo de legados como si con ello confesaran su incapacidad, total falta de voluntad, de compromiso y complejo de inferioridad para ser dignos del glorioso pretérito que emblemas como el Rex atestiguan y comprueban. Destruyéndolos creen acabar con la memoria barranquillera. Pobres ilusos.
Por si fuera poco, la refulgencia universal de Adriana Ocampo, Shakira, Paulina Vega Dieppa, Sofía Vergara, ahora les salta Daniela Mass. Respeta, respeta. Por eso en términos patrimoniales la pujante salvaguardia de que ha sido objeto el antiguo Rex insufla vivificante y poderosa energía a la Memoria e Identidad de esta ciudad pionera.
Y hoy como ayer son foráneos progresistas, emprendedores con visión del porvenir quienes han logrado esta proeza: Eliodoro Fajardo Gómez, Néstor Sánchez Sánchez y Heriberto Canello. Ciudadanos santandereanos que con enorme perspectiva de futuro han hecho una considerable inversión que esta ciudad y sus raizales generosos y agradecidos como el que más habrán de reconocerles y recompensarles con creces, como bien se lo merecen.
Es fácil imaginar la gran acogida que ha de tener su magnífica oferta. Si el ayer ofreció estímulos a la fantasía y a los sueños con el cine; hoy, gracias a esos empresarios se pueden encontrar, en un escenario de película, ¡El Rex!.
Exquisiteces y delicias y manjares en menús y buffet's, también de película, que harán sentir a los comensales como si estuvieran en una de esas miles y miles de escenas de restaurante (¿recuerdan la de Al Pacino en "Perfume de Mujer" o la de Geoffrey Rush en "La Mejor Oferta"?) que en el celuloide han sido.
Así que bienvenidos a disfrutar de un banquete gastronómico capaz de satisfacer al paladar más exigente, en un recinto cual set cinematográfico: El ¡Rex!. Situado en la esquina de la calle 37 -Jesús- con la carrera 45 -Líbano-, en esta Barranquilla que no expira ni fenece como quisieran -cuán equivocados están-, olvídense sus enemigos abiertos y escondidos como las alimañas pantanosas, de los charcos nauseabundos y pestilentes que son.
Pero no nos dejemos estropear este maravilloso acto de fé con la ciudad y su futuro que sabemos -este Rex lo demuestra- no tendrá The End.
Y que, con las 7 potencias que tanto aman a Barranquilla y a los barranquilleros, así sea! Y Shangó, Obatalá, Odimaré, Eleguá, Ochún, Yemayá... Mucho Aché Sabio Oh Sile Oh, Ecua-Jey... pa' mi padrino.
Así que si el ayer fue de Luces, Cámara, Acción...! hoy con la sabia, experta, fina y aquilatada conducción del Cheff Elkin Vargas Manotas, barranquillero, cerebro fugado quien fue atraído de los Estados Unidos, donde desarrolló una fulgurante carrera en la prestigiosa cadena The Case Caze Factory en Virginia, especialmente para este ambicioso como auspicioso proyecto gastronomo-cultural, el asunto es de batería de cocina, ingredientes seleccionados, fuego, sazón y el toque personal para ofrecer el variado como apetitoso menú que incluye los platos más representativos de la gastronomía colombiana.
Se pueden disfrutar de los Santanderes, el desayuno con arepa; de Bogotá, el Ajiaco Santafereño; de Antioquia, Bandeja Paisa, Cazuela de Fríjoles, Mondongo; de la Costa Atlántica, Arepa de Huevo (de codorniz), carimañolas, Ceviche de Mariscos, Ceviche de Carimañolas, Ceviche de Pescado, Ceviche Mixto Natural, Coctel de Camarón, Patacón con Hogao, Picada de Chicharrón, Chuletas, Sobrebarriga a la Criolla, Sobrebarriga a la Parrilla, Mojarra a la Criolla, Mojarra Frita, Sancocho de Rabo...
Por si fuera poco, el Cheff Barranquillero Elkin Vargas Manotas ha puesto toda su creatividad y conocimientos refinados a su paso brillante por The Case Caze Factory en Virginia, USA, para ofrecer fascinantes y atractivos platos originales con los sugestivos nombres de Pechuga Rex, Picada Cine Rex, Salmó Rex Gratinado... como el título de una película, "La Gran Comilona" está servida en el Restaurante Rex de la calle 37 -Jesús- con la carrera 45 -Líbano-, en Barranquilla, por supuesto!!.
El Arranque:
José Nieto Ibañez, Barranquillero íntegro, afluente máximo a la memoria e identidad de su ciudad natal, ha recibido un merecido reconocimiento y homenaje a su ilustre carrera al situar pintada su figura en el bello mural que se puede admirar al fondo, parte superior de El Rex.
Muy bien por los tres empresarios santandereanos!!
