Como siempre lo hago, encontré por ahi un mensaje que me llamó la atención, que deseo compartir con usted: Tomado del libro "Momentos maravillosos" de Tiberio López Fernández.
"Habia un grupo de cuatro personas que se llamaban, Alguien, Nadie, Todo el mundo, y, Cualquiera. "Todo el mundo" estaba seguro de que "Alguien" haría un trabajo importante que "Cualquiera" podría hacer, pero "Nadie" lo hizo.
"Alguien" se disgustó porque pensó que era el trabajo de "Todo el mundo" y que "Cualquiera" podía haber exigido de "Alguien" que lo hiciera; y podia haber acusado a "Cualquiera" por no realizar el ttrabajo que "Todo el mundo" debia hacer.
Conclusión
Si "Alguien" trabaja con amor e interés, entonces "Nadie" culpará a "Cualquiera" porque "Alguien" habrá hecho el trabajo en que "Todo el mundo" debe participar.
En resumen: "No hay que esperar que otro realice lo que compromete mi responsabilidad.
Hay un refrán parecido (no recuerdo de quién) que dice:
"Una persona trabaja por tres; dos trabajan por una; y tres por ninguna".
Otra realidad, si no miremos alguna empresa donde se encuentren varias secretarias en una misma oficina, ¿o no?
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NOTICIA DE ÚLTIMO MINUTO...
Parece que ya encontraron nuevamente a los cuatro reunidos...