Autor: Jairo Cala Otero
Con motivo de la Semana Santa (obsérvese la ortografía de las dos últimas palabras), bien vale un esfuerzo de concentración a la hora de poner los dedos sobre el teclado de una computadora. Porque todo movimiento equivocado por causa de no conocer la ortografía, conduce a cometer errores.
¿Le parece bien que corrijamos, o escupimos también sobre el idioma, como lo hicieron los judíos sobre Jesús de Nazaret? Si contestó sí, o si contestó no, el asunto idiomático es igual. Veamos:
Los sustantivos y adjetivos que forman parte del nombre de los períodos litúrgicos o religiosos se escriben con inicial mayúscula. Así que, atentos en periódicos y demás medios periodísticos: se escribe Cuaresma, Semana Santa y Pascua de Resurrección. Nunca en minúsculas iniciales, como suelen hacerlo muchos.
Por ser consideradas mundialmente fechas históricas (en nada influye aquí el credo) se escriben con mayúsculas iniciales las denominaciones de Viernes de Dolores, Domingo de Ramos, Jueves Santo y Viernes Santo.
Quizás en Colombia no se den exactamente esos casos, pero se contempla que ‘se escriban los nombres de los pasos, imágenes y cofradías con mayúsculas iniciales y sin cursiva ni comillas’. Entonces La Borriquita, La Sagrada Cena, El Prendimiento, Cofradía del Cristo de la Columna, Hermandad del Cristo de la Corona…’, más conocidos en España. Entre los colombianos: El Santo Sepulcro, La Virgen de los Dolores (o La Dolorosa), La Resurrección de Jesús, entre otros.
Pero queridos y apreciados lectores: las normas que muchos eluden ofrecen también unas «despreocupaciones». ¡Qué consuelo!, dirán algunos. Se escriben con inicial en minúscula algunos términos religiosos como vigilia, eucaristía, misa, liturgia de la palabra, confesión, comunión y procesión.
Y para referirse al recorrido que hiciera Jesús hasta el monte Gólgota, se debe usar la palabra viacrucis. Antes era en dos palabras: vía crucis. Ahora, se integró. Claro, no para aliviar el peso de la cruz que cargó el Maestro de Galilea, sino para hacer más versátil y funcional el término. Yo sigo recorriendo mi propio viacrucis. ¿Usted también?