Autor: Fredy Luis Mozo Polo
A Colombia llegaron los males de la caja de pandora, que no es ninguna caja sino una tinaja. La caja de los males de la mitología griega que destapó la bella doncella atraída por la curiosidad. Parece que todo lo que guardaba el recipiente hubiera llegado a la geografía colombiana.
Qué bien quisiéramos ver a la hora del almuerzo o apenas entrada la noche frente al televisor las mejores noticias, pero no es así. Parece que todos los males que volaron de la tinaja se esparcieron por todo el globalizado mundo de hoy y se concentraran en Colombia como una loma de pesadas piedras para que el viento no las arrastre.
¿Que habrá hecho Colombia para que le tocara la mayor parte desde la nefasta apertura hecha por la curiosa mujer de Epimeteo?
Todo comienza en nuestra patria con una cruenta historia; desde las primeras visitas recibidas por nuestros antepasados indígenas en la época colonial. Seguidos por los episodios históricos protagonizados por Bolívar y Santander para frenar la arremetida del General Morillo y su tropa enviados por la península en su afán de lograr la reconquista; La triste patria Boba y la independencia que puso fin al imperio español.
Los enfrentamientos políticos de federalistas y centralistas trasladándose a unos y otros sectarios de hoy que todavía no zanjan diferencias y mantienen abiertas las brechas sociales políticas y económicas. La posterior guerra de los mil días hecho que debilita al estado colombiano y propicia la separación e independencia de panamá a comienzos de siglo xx.
La masacre de las bananeras, la muerte del caudillo Jorge Eliécer Gaitán y otros líderes que han marcado con tinta oscura el devenir político del país. El surgimiento de grupos antagónicos con letales consecuencias. La toma y retoma cruenta del palacio de justicia, sede del poder judicial en Colombia.
Desastres naturales por falta de prevención y planeación. la erupción de un volcán arrasó y desapareció un pueblo entero y sus miles de habitantes. Por no cuidar el medio ambiente los ciclos biológicos hacen estragos: si llueve es malo y si no llueve también es malo.
Pero el viento no se ha podido llevar la corrupción, la viveza, la intolerancia, la obtención del dinero fácil, por el contrario aparecen otros males: la venta de importantes activos, los sobrecostos.
La salud en estado crítico. El virus del Sika, achaca y preocupa a la población sin solución a la vista. La mala hora de los niños de la Guajira. y si a todo esto le agregamos escándalos burocráticos y delitos comunes. Un fin de semana deja cualquier cantidad de muertes violentas.
Cualquier ciudadano después de una rumba conduce irresponsablemente su auto como si nada le fuera a pasar. Desafortunadamente esto es lo que los colombianos nos acostumbramos a oír, leer y ver en los medios, sin embargo todavía nos queda la esperanza lo único que se quedó en el fondo de la famosa tinaja que destapo la curiosa mujer.
Debemos cambiar de actitud y esquema mental para cambiar al país.
NOTA ACLARATORIA
La caja de Pandora es un artefacto de la mitología griega, tomada del mito de la creación de Pandora, que fue la primera mujer creada por Hefesto por orden de Zeus.
La historia cuenta que Zeus, deseoso de vengarse de Prometeo por haber robado el fuego y dárselo a los humanos, presentó al hermano de éste, Epimeteo, una mujer llamada Pandora, con quien éste se casó. Como regalo de bodas, Pandora recibió un misterioso pithos—una tinaja ovalada, aunque actualmente sea citada como una caja— con instrucciones de no abrirlo bajo ninguna circunstancia.
Los dioses habían otorgado a Pandora una gran curiosidad, por lo que decidió abrir la tinaja para ver qué había dentro. Al abrirlo, escaparon de su interior todos los males del mundo. Comprendiendo el grave error cometido, rápidamente cerró el recipiente, pero ya era demasiado tarde: todos los males ya habían sido liberados.
Solo uno permaneció en el fondo: Elpis, el espíritu de la esperanza.
Hoy en día, "abrir una caja de Pandora" significa una acción en apariencia pequeña o inofensiva, pero que puede acarrear consecuencias catastróficas.