Autor: Alejandro Duarte Rueda
Comienza el año electoral y surgen numerosos candidatos para gobernaciones y alcaldías de todas las vertientes, de todas las condiciones sociales y económicas, de todos los calibres.
Ante esa inmensa oferta de nuestra democracia es de gran importancia seguir escogiendo a través del voto gente que realmente tenga valores, preparación, condiciones humanas, liderazgo y sobre todo una hoja de vida intachable.
En el departamento del Atlántico hay una gran diversidad de candidatos para las alcaldías de nuestros municipios, y por eso es vital que la gente analice bien antes de decidir por quién votar. Para eso contamos todavía con seis meses antes de los comicios.
En el caso de Barranquilla, esta ciudad que ha venido creciendo con una gran perspectiva nacional e internacional, con importantes gremios empresariales y comerciales, debe tener al frente a personas con capacidades para liderar estos sectores que vienen jalonando el progreso de esta capital.
………..
Para hoy lunes está prevista la instalación de la nueva junta directiva de la Cámara de Comercio de Barranquilla que fue elegida el pasado 4 de diciembre, una directiva que deberá aunar los esfuerzos de quienes deseamos continuar apoyando, aportando nuestras ideas, conocimientos y experiencias para el beneficio general de todos los que vivimos en esta ciudad.
Consideramos que el aporte de los gremios empresariales y comerciales ha sido fundamental para que Barranquilla se haya transformado, para que se haya dinamizado, y cada vez se haga más atractiva para los inversionistas nacionales y extranjeros con su terminal marítimo, los TLC, el río Magdalena, la avenida del río, y los programas y proyectos que adelanta la administración distrital. Todo eso vale la pena que sea apoyado por los nuevos directivos de la Cámara de Comercio, que direccionen ese proceso de transformación que está viviendo Barranquilla.
No pueden volver esas épocas de ingrata recordación en que Barranquilla se rezagó porque la politiquería rampante no la dejaba crecer, una politiquería enquistada en todos los niveles del poder, enroscada también en la Cámara de Comercio, y así la entidad no avanzaba, no crecía, y la ciudad tampoco. Afortunadamente desde hace unos pocos años, eso viene cambiando, han llegado nuevos aires a renovar anticuadas costumbres y prácticas clientelistas, y todos estamos llamados a ser parte del nuevo proceso.
De nuevo repetimos que la Cámara de Comercio debe ser una entidad incluyente, donde ningún sector de la economía esté excluido, que de ahora en adelante, el trabajo sea mancomunado, sea en conjunto, cualquiera que sea quien esté al frente de la presidencia de la entidad.
Por eso todos deseamos que la nueva junta directiva de la Cámara de Comercio de Barranquilla que asume hoy esté a tono con las necesidades de la ciudad,
¡Unidos somos más!