Autor: Alejandro Duarte Rueda
No podríamos imaginarnos una ciudad como Barranquilla sin la presencia de la Policía Nacional que es la que día a día, de mañana, de tarde y noche, vigila y controla el orden público en la comunidad. Sería un caos total esta capital o cualquier parte del país sin la actuación de la Policía.
Por eso en estos 123 años de su existencia no nos queda sino exaltarla, afirmar que es una de las instituciones más necesarias para la conservación de la seguridad y la convivencia ciudadana.
Destacamos el hecho de que en Barranquilla la institución cada día se esfuerza por presentar resultados en lo que tiene que ver con frenar las extorsiones, el abigeato, los homicidios y atracos a mano armada.
La comunidad atlanticense y barranquillera tiene que sentirse motivada y muy segura en la cuadra, en el barrio, en los cuadrantes, en las comunas, en los escenarios públicos, en los establecimientos de comercio, y en todas las empresas, donde la seguridad se nota con la presencia de un uniformado.
Desde hace mucho tiempo hemos insistido en la necesidad de que el impuesto de convivencia y seguridad ciudadana sea invertido en gran parte en la vigilancia a través de la Policía Nacional.
Por eso vemos ahora una institución profesionalizada, diferente a la que nos tocó hace 30 años; vemos que cada día el agente es más profesional, está más capacitado, es más respetuoso, y la gente siente más confianza en el actuar del organismo, confianza que no existía hace 30 años porque inclusive la comunidad, los comerciante y empresarios desconfiaban de la institución.
Hoy eso ha cambiado totalmente, tenemos mayor confianza en el agente de policía, ya queremos que esté permanentemente con nosotros, ya hay necesidad de olvidar el pasado con el propósito de que realmente la Policía sienta que la comunidad está a su lado, que la respalda y apoya.
Y somos conscientes de que no podría existir una verdadera seguridad si no colaboramos con la institución, si la comunidad no está atenta en informar, en colaborar, en prestar todo el apoyo que la Policía requiere para que efectivamente el resultado sea exitoso como está sucediendo en la ciudad de Barranquilla.
Desde aquí un caluroso saludo de felicitación a todos nuestros policías, hombres y mujeres, oficiales, suboficiales, agentes, personal de nivel ejecutivo y personal civil, que son verdaderos héroes. Reciban un saludo de apoyo y agradecimiento por su labor en defensa de los ciudadanos.
Ya son más de 180 mil hombres y mujeres, de las mejores calidades humanas, profesionales y equipados con tecnología de punta que cumplen cabalmente su misión constitucional.
Cada uno de ellos hace grande a la Policía Nacional, una institución que desde su fundación el 5 de noviembre de 1891, ha sido de puertas abiertas y siempre ha dado cabida para todos los colombianos, sin distingos de género, color de piel, condición social o religión.
Felicitamos al comandante de la Policía Metropolitana, Brigadier General José Vicente Segura Alfonso, quien ha hecho de la institución una entidad muy responsable; necesariamente tenemos que felicitarlo porque es mucho el beneficio que hemos conseguido y la seguridad que nos ha brindado en estos cortos años que lleva al frente de la institución.
En los negocios, los establecimientos de comercio, que están expuestos al peligro y el accionar de los delincuentes, ahora con el correr de los días se siente mayor seguridad por la presencia policial, y esa presencia uniformada se debe principalmente a que han existido recursos para su movilización y para sus equipos.
En estos 123 años la comunidad del Atlántico y de Barranquilla felicita a la Policía, aniversario que nos parece muy importante porque la experiencia acumulada en más de un siglo, ha sido capitalizada para mejorar la convivencia de todos los residentes en esta ciudad.
¡Unidos somos más!